Misión Santa Ana

En los años 1990, surgió en la provincia el deseo de abrir una comunidad en el Sur de Chile, como servicio apostólico al pueblo Mapuche y otras necesidades de esta parte del parte
La Superiora Provincial Sor Ana Luisa Querzoli y la asistente Provincial Sor Ans Adelina Griffiths viajan al Sur en busca de un lugar de misión. Pasando por la Araucanía y demás provincias, Chaitén, Ancud y la Isla de Chiloé. Al regresar a Santiago, en reunión de Consejo se profundiza y se discierne con el fin de escoger Purén para constituir una Comunidad Religiosa de las Hijas de Santa Ana. En marzo de 1991, las dos primeras hermanas van a dicha localidad y viven en el primer año con mucho sacrificio de mucha precariedad, en la población más pobre del pueblo de Purén, denominado el Esfuerzo.
La comunidad oficialmente se constituye el 16 de diciembre de 1992, siendo Superiora Provincial Sor Ana Raffaelina Di Gioia, con las hermanas.
La comunidad inicia su misión con la promoción de las comunidades Mapuches, particularmente con la mujer mapuche, apoyadas en el proyecto “Huepil” que el sacerdote José Painemilla encomendó a las hermanas. Este proyecto trataba de las visitas a las comunidades mapuches dando la posibilidad de que participaran en talleres (costura, telar, palillos, etc) Así también para el hombre mapuche elementos para el cultivo de la tierra junto con esto la evangelización: lectura de la Palabra, encuentros de oración, visitas a las familias mapuches.
El 17 de marzo del 2008, las hermanas adquieren una casa y se trasladan a vivir al centro de Purén, lo que permite estar más cerca de la parroquia y además abrirse a nuevos desafíos y misiones.


